diciendo, yo no lloro, ¿lloras tú?

domingo, 28 de marzo de 2010

hace cuatro días que viniste a verme porque yo estaba triste, y me jodio que aparecieras de sorpresa, no me gusta ser un problema en la vida de nadie, pero ahi estabas tu, de pie en la puerta, diciendo que saliste a las siete de la mañana de tu casa para llegar temprano a verme. te abracé. compraste chocolates, un conejito enorme, y nos quedamos encima de mi cama viendo tele. en esos momentos queria estar sola, queria dejarla golpear y sentirme vapuleada por la tristeza que sentia. tenia que estar sola, pero estabas tu. quisiste que te hiciera cariño en el pelo y te rechacé sin hacerme mayores problemas, te dije que no queria hacerlo y tu entendiste y decidiste irte. eres maravilloso, pensaba. todavia lo pienso. resulta tan desolado volver a ese departamento ahora que ya no te vere más, y tener que abrir el mueble de mi cocina y pillar el conejito de chocolate intacto. no puedo tirarlo, me lo voy a comer, y me va a joder comerme el chocolate... va a ser como el ultimo zacudón de tu ausencia. y me jode.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Seguidores